La cerveza mejora el sistema inmunológico
La cerveza mejora el sistema inmunológico
La cerveza, al igual que otras bebidas, suele ser sometida a varios estudios por los científicos que tratan de encontrar nuevas cualidades en ella que agreguen un valor beneficioso.
Diferentes estudios han analizado los beneficios del consumo moderado de cerveza en adultos sanos para el sistema inmune ya que, según asegura la directora del Grupo de Inmunonutrición del Instituto de Ciencia y Tecnología de Alimentos y Nutrición (ICTAN), Ascensión Marcos, esta bebida mejora algunos aspectos del sistema inmunológico mejorando así la respuesta de nuestro organismo frente al ataque de los microorganismos infecciosos. Por supuesto, siempre y cuando sea de manera moderada y dentro del patrón de la dieta mediterránea.
En ese sentido, ha destacado los resultados de un estudio realizado por el ICTAN, organismo del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), que determinó que el consumo moderado durante un mes podría producir una mejora en el sistema inmunológico, principalmente en las mujeres.
Según instituciones internacionales, se entiende por consumo moderado de alcohol una ingesta que no supere los 30 gramos al día en los hombres, lo que equivaldría a tres cervezas tradicionales o 600 mililitros, y 20 gramos al día para las mujeres, es decir 2 cervezas o 400 mililitros.
Ahora bien, en lo que respecta a los beneficios cardiovasculares, se ha destacado que también hay evidencia científica de que tanto la cerveza como otras bebidas fermentadas como el vino o la sidra son beneficiosos, esto debido a los nutrientes beneficiosos que aporta la cerveza, como los minerales, vitaminas o antioxidantes.
Por su parte, el lúpulo contenido en la cerveza podría influye positivamente en los parámetros sanguíneos del metabolismo oxidativo, evitando la oxidación de las células. Y tras el consumo de cerveza sin alcohol se aprecia una posible reducción en los biomarcadores de inflamación y en el daño oxidativo, y un aumento en la defensa antioxidante, con implicaciones en las enfermedades cardiovasculares.
Del mismo modo, los niveles del colesterol HDL en la sangre, el denominado 'bueno', también podrían experimentar un aumento tras un consumo moderado de cerveza, lo que se asocia a un menor riesgo de cardiopatías isquémicas y protección del organismo frente a enfermedades cardiovasculares.
Por otro lado, otros datos arrojados por este estudio, apuntan a que los consumidores moderados de cerveza presentan una composición corporal más adecuada que los no consumidores, especialmente en el caso de los varones, con una menor circunferencia de cintura y porcentaje de masa corporal.
Datos que contrastan la llamada "barriga cervecera" que habitualmente se asocia al consumo de cerveza, ya que la aportación calórica de la cerveza es muy baja. En concreto, una cerveza de 200 mililitros tiene tan sólo 90 kilocalorías y en el caso de la cerveza sin alcohol esta cantidad se reduce a una media de 34.
Finalmente, el estudio también determino que el consumo moderado de esta bebida no es culpable de la obesidad, sino de una alimentación desequilibrada, la falta de ejercicio y, en algunos casos, la información genética.
Ahora conocemos un nuevo estudio que nos muestra la relación entre la cerveza y nuestro sistema inmunológico y ahora ya puedes empezar a mejorar tu salud con Cerveza Masónica, la mejor cerveza artesanal creada con ingredientes naturales.
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